Powered By Blogger

martes, 14 de junio de 2011

MUYMÍA*

Empiezo mis días al lado de una perra remolona, mimosa y feliz. Sin un beso de buenos días, pero con la seguridad de que lo serán. El principio de cada mañana me trasnmite una sensación extraña y frustante, una sensación de "incertidumbre" que me ahoga por momentos...y es ahí cuando pienso: "mierda, porqué?". La historia se repite una y otra vez, pero todo tiene su fin, y escucho un poco de mi "música de ser feliz"  y me calma, consigue hacer ese efecto que tanto la caracteriza y que tanto me gusta a mi. Chute en vena de buena onda. Hoy, solo funciona eso, única y exclusivamente. Bueno, si soy sincera, un lambetazo a tiempo también causa un efecto parecido en mi, pero puedo decir que a esto ya estoy muy (mal) acostumbrada. Sí, soy afortunada. Suena mi canción de siempre, en el momento exacto, en mi sitio. Modo autista. Y suena una vez, y otra y una tercera, y es ahí cuando hago un pause y pienso: "tíñete, quítate esas gafas retro que llevas, pintate las uñas color nude y haz algo MUY TUYO". Imediatamente cojo mi caja de lápices y mi cuaderno de batallas y salen en automatico palabras mías, sólo mías. Paradojas llenas inquietud y muy poca preocupación por un mañana (real o irreal), me da lo mismo. 


Vivo cada segundo, cada beso,  cada abrazo, cada sentimiento, cada palabra...

1 comentario: